jueves, 14 de mayo de 2009

Los Chicos del Coro


Los Chicos del Coro

Nacionalidad

Año: 2004
Director: Christophe Barratier

"En 1949, Clément Mathieu, profesor de música en paro, empieza a trabajar como vigilante en un internado de reeducación de menores. Especialmente represivo, el sistema de educación del director Rachin apenas logra mantener la autoridad sobre los alumnos difíciles. El mismo Mathieu siente una íntima rebeldía ante los métodos de Rachin y una mezcla de desconcierto y compasión por los chicos. En sus esfuerzos por acercarse a ellos, descubre que la música atrae poderosamente el interés de los alumnos y se entrega a la tarea de familiarizarlos con la magia del canto, al tiempo que va transformando sus vidas para siempre"

Y ahora es cuando doy las gracias de todo corazón a mi profesor de música.
Muchísimas gracias por obligarnos a ver esta película que yo consideraba "aburrida" y sin un argumento "interesante". Es la típica película que de por sí no me llama nada nada la atención pero que la ves y te prendas de ella desde la primera escena.

Me llamo Clément Mathieu, vigilante en paro, músico fracasado

¿Qué decir? Esta película alcanzó una gran fama en su época y no es para menos. Con la moraleja de que la música amansa a las fieras de fondo nos presentan a unos personajes a cada cual más distinto. Por un lado Clément, el profesor comprensivo y bueno, capaz de perdonar, porque en cierto modo sabe que con la violencia se genera más violencia. Por otro lado el cruel e incomprensible Rachin, cuyo único propósito es alcanzar fama y honor.

Y por fin, los niños. Desde Morhange, en cierta parte incomprendido y caprichoso, hasta Pepinot, el niño de quien todos se aprovechan.
Está ambientada en los años en que la educación reprimía tanto, la época de post-guerra, que tantas muertes generó, razón de la cantidad de huérfanos.

Siento en sus miradas deseos de aire libre, de construir cabañas junto al cielo. El buen tiempo les pone tristes

Es evidente la intención del director en todo momento; los niños no son del todo malos. A veces son incomprendidos, a veces simplemente imitan lo que ven a su alrededor... hay tantos motivos que llevan a la delincuencia, igual que hay veces que no hay ninguno. Se despide positividad en toda le película, pero siempre con honestidad. Todos tienen un futuro, incluso el que no sabe "cantar" será tan importante como el que sí, pues sujetará el "atril". Es imposible ver esta película y que no te embargue un deseo de vida.

Por otra parte, imposible no hablar de su banda sonora, que desde un primer momento me cautivó. Una voz a capella puede ser tan bella. Simplemente espectacular.


Esta es otra de esas películas que enamora, que te hace disfrutar, que te hace meterte en la piel de esos niños cuando menos te lo esperas. Inevitable no desearles que se cumplan sus sueños.

Una vez más, los franceses vuelven a sorprenderme con ciertas escenas, desde el director jugando con un avión de papel, hasta la escena de la despedida, que desprenden ese toque nostálgico, dramático y esperanzador.

Y desde ya os animo a verla. Una película preciosa donde las haya. Y de las que siempre recuerdas con una sonrisa en la cara.

Yo, que juré olvidarme de la música para siempre jamás...Jamás digas jamás. Siempre hay cosas que intentar

Nota: 8.5

2 comentarios:

Hikari dijo...

Me gustó mucho esta película! La he visto tres veces ya: una en clase de francés (subtitulada), otra en música y la tercera en mi casa. Me encanta todas las canciones... Caresse sur l'ocean... preciosa ^^

Raquel dijo...

Una pelicula simplemente perfecta, que me encanto y que son de esas que te llegan y que te hacen reflexionar.

La banda sonora como bien comentas es espectacular, me encantan las canciones, y de hecho en el coro de nuestro instituto Cris y yo cantamos tres de ellas *__*