Preface

Estaba harta. Odiaba romper mis promesas, era lo más deshonrado que podía hacer nadie, especialmente yo siendo quien soy. Empecé a lanzar bolas de fuego contra las barras de hielo que no parecían querer derretirse. Grité, chillé e hice cuanto pude para salir de allí… pero estaba atrapada. Miré hacía lo alto donde el día daba paso a la noche una vez más. Él me esperaría, seguro que sí, pero aún así debía volver cuanto antes. No sólo estábamos en peligro nosotros...

Ella lo prometió. Prometió que sería en otoño. Entre las secas y marchitas hojas volvería a mí y retomaríamos la vida donde la dejamos. Volveríamos a ir todo los sábados a ver el amanecer al muelle, los cisnes al lago y el bosque donde la vi por primera vez. Caminaríamos por el desierto y los mares, como hacíamos antaño y la amaría aún más de lo que nadie sería capaz de amarla. Mucho más que él. Todo eso pasaría si hubiera vuelto por otoño.

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Me gusta escribir, bastante, muchísimo. Pero nunca me había animado a escribir nada, me daba miedo hacerlo mal y desanimarme y dejarlo. Por eso seguía inventando historias en mi cabeza y decía: en un futuro... lo escribirás. Y ayer 1/8/08, fue el día que empecé a escribir. Va a ser un simple relato contado en primera persona por ambos. Pero es agradable escribir las personalidades de dos seres tan diferentes.